Las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) están presentes en casi todo lo que hacemos hoy en día. Usamos el móvil, internet, redes sociales y aplicaciones para estudiar, hablar con amigos, ver videos, jugar y comprar entre otras muchas cosas. Esto hace que todo sea más rápido y fácil. Si tenemos dudas sobre algo, podemos buscar la respuesta en internet al momento, y hay un montón de recursos que nos ayudan a aprender cosas nuevas de manera divertida. Además, las redes sociales nos permiten estar conectados con amigos y personas de todo el mundo.
Pero, también hay algunas cosas malas. A veces, pasamos demasiado tiempo frente a las pantallas y nos distraemos. Eso nos puede hacer desconectar de lo que está pasando a nuestro alrededor, como no prestar atención en clase o dejar de hacer cosas fuera de internet, como hablar con la familia o salir con amigos. También puede ser un problema estar siempre conectados, ya que no tenemos momentos de descanso real y puede llegar a afectar a nuestra salud tanto física como mental.
En la escuela, las TIC son muy útiles porque nos permiten aprender de una forma más entretenida. Podemos ver videos, usar aplicaciones o buscar información mas rápido. Sin embargo, también pueden ser una distracción en clase. A veces, preferimos mirar el móvil en vez de escuchar al profesor, lo que nos puede afectar en los estudios. Además, no todos tienen la misma tecnología, por lo que algunos pueden quedarse excluidos.
En resumen, las TIC son geniales, pero debemos saber usarlas con responsabilidad. Son herramientas increíbles para aprender y estar conectados, pero no hay que dejar que nos controlen o nos distraigan demasiado. Es importante encontrar un equilibrio entre el mundo digital y el real.
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